Seguidores

16/01/2016

PONTE EN SU LUGAR

Es difícil. Ponerse en el lugar del otro. Es muy complicado. Vamos tirando en la vida, con unos problemas o con otros. Vamos pasando los días cuando las cosas no van del todo bien. Le echamos siempre un poco de culpa al otro. Porque claro, no vamos a ser nosotros los que fallemos. No, es que el otro no nos entiende. El otro. No sabe por lo que estamos pasando. El otro. El otro. El otro. Es el novio, el jefe, la jefa, el marido, la mujer...el padre, el hermano o el amigo. Da igual.
 Iba a decantarme por la dificultad especial de alguna de estas situaciones...pero sinceramente son igual de complejas todas. Quizá la más generosa es ponerse en el lugar de la pareja. Y la mas compleja. Aquéllas que afectan a lazos de sangre tienen un componente químico que las hace singulares pero el sentimiento de deber es tan nítido que el proceso suele ser mas sencillo, aunque a veces se tiñe de rencores, recuerdos mezclados... En fin. Hay siempre una dosis de generosidad y de olvido importante para poder ponerse en el lugar del otro. Hay que ser muy buena gente.
La joya de la corona: El marido. Ponerse en su lugar. Llevas todo el día de la Ceca a la Meca. Has preparado desayuno, planchado uniformes a los niños, has aguantado a tu madre una hora al teléfono. Te ha abducido una telenovela absurda. Y luego has tenido que ir a la carrera sin poder ni peinarte Has pasado en definitiva un día de mierda. Y llega él. Se quita el traje. Sigue oliendo a nuevo, como cuando salió. Como te gusta su olor! Sonríe, te besa cariñoso y te ofrece compartir una cerveza y algún chascarrillo. Tú estallas que para chascarrillos estás tú!!! Él alucina. Lleva diez horas currando, aguantando a una jefa que es imbécil, no ha comido por terminar un informe y poder llegar antes a casa. Alucina. No ha abierto la boca y le ha caído la mundial. Con las mismas que se ha quitado la chaqueta se la vuelve a poner y se va sin dar un portazo. Espera en el jardín respirando y vuelve a entrar a los dos minutos. Es tu oportunidad. Y la suya. Ponte en su lugar.