Seguidores

29/05/2024

MI MADRE ES UN SER DE LUZ

Porque no todo el mundo tiene zonas oscuras. Ella no. Ella no. Ella es un ser de luz. Es la mejor de las madres, la más guapa, la más lista, la más mejor del mundo mundial. Es la mía. Es mi madre y siempre lo será. Aunque yo sea viejita ella será siempre mi mamá y yo su niña.  Recordará la hora de mi nacimiento, lo gorda y lozana que yo era de bebé. Como ahora. Que la paraba la gente para decírselo. Que hija tienes. Que lorzas. Mi ropa almidonada en los paseos por el parque donde vuelan los pavos reales. Mi madre. La mejor.

De ella mana paz a través de la tormenta, por mucho que llueva. El humo del chéster le da un aire de película en blanco y negro, de recuerdo. Aunque no lo parezca, se toma su tiempo para responder. Aunque no lo parezca, se calla más de lo que dice. Ella siempre es refugio. Ella es sólo oídos cuando mi mundo se atribula. Aunque no lo parezca, ella siempre está atenta, te escucha todo, y en un rincón de su corazón atesora respuestas. Mi madre se esconde por timidez, aunque no lo parezca, es difícil conocer su espíritu profundo. Mi madre es discreta, aunque no lo parezca, pues frena mucho más de lo que siente. Mi madre no miente nunca. Mi madre es buena. 

Detrás del jeroglífico que es su caligrafía, hay un orden perfecto y una comprensión profunda del hombre. De profesión doctora como extensión natural de su carácter, porque corre por sus venas el juramento de curar y cuidar al otro. Sin necesidad de hacerlo. Está en su naturaleza. Mi madre, aunque no lo parezca, cuidaba a todos. 

Mi madre, a través de la comida, reponía los silencios, chantajeaba la razón y recompensaba la pereza. En la cocina dejaba olvidado el día. En la salazón desarrollaba su imaginación y derramaba su caos y su alquimia. Mi madre nunca ha dejado de sentir curiosidad, sin importarle estar al compás de las modas que vienen y van.

Mi madre es un ser de luz, inconfundible allá donde se encuentre.

Mi madre es un ser de luz, con sus silencios y sus discursos. Con su pasión.

Mi madre es un ser de luz, con su prisa y con su calma. 

Mi madre es un ser de luz, que solo suma, que solo aporta. 

Mi madre con su presencia ilumina mi cordura. 

Mi madre es un ser de luz, que en la distancia incluso, arropa mi corazón. Mi madre es un ser de luz, que es mi sombra.

Mi madre es un ser de luz, con sus amigas, con su familia y con su amor.

Mi madre encuentra entre las sombras el candil de la esperanza. Mi madre ve cosas bonitas donde yo me hubiera perdido en el bochorno. Mi madre, sin caer en el absurdo de la fantasía, me ofrece siempre una alternativa. Mi madre consigue sacar de la pista al más seguro de los mortales porque lleva dentro la luz y la inteligencia. Gracias madre.


No hay comentarios:

Publicar un comentario