Yo pensaba que pertinaz era terco, obstinado; y que tales adjetivos llevaban implícito en su significado, la voluntad o carácter. Es decir, que solo el que dispone de estos puede ser tachado de tal. Pongamos como ejemplo otro rasgo: vago. Vago solo puede ser quien puede no serlo.
A lo mejor me confundo con tenaz, persona que pone mucho empeño en algo. Como tienen la misma terminación. Pero digo yo que para ser obstinado, como para poner harto empeño, forma fina de cabezota, hace falta ser persona. O animal. Que los hay con personalidad. Como Leo, perro chuquitajo y juguetón, que se cree humano y cuando se sienta la familia a la mesa, él se coloca al ladito, si puede, subido en silla o banco. Muy serio, para que no le regañen y no le manden bajarse. A la espera de degustar las delicias del día. A veces, muy fino, pone una patita en el mantel. Como un comensal más. Mira a babor y a estribor, haciéndose el interesante. Muy digno.
También me puedo estar liando con perspicaz, persona que percibe detalles a mucha distancia, o la que capaz de percatarse de cosas que pasan inadvertidas para los demás. Me gusta más la última. ¿Tiene que ver con perspicacia la obstinación? ¡No! Acaban igual. Otra vez. ¿Puede ser un objeto perspicaz? Para mí que no. Hace falta alma para esa percepción que otros no ostentan. Esa intuición de la energía que rodea a las acciones, que mana de las personas. Como agua que cae en cascada. ¿En que se transformará?
Por eso no entiendo la unión de "sequía" y "pertinaz" en una misma frase, uno como adjetivo de la otra. La sequía puede tener magnitud, intensidad. La sequía puede diferenciarse de otra que haya ocurrido. La sequía puede ser histórica. La sequía se caracteriza por la intensidad, duración, área y frecuencia. La sequía es un hecho. La sequía se mide, se acota. Por eso no entiendo que le tachen de pertinaz a la sequía. Será licencia literaria. Pero es como darle un halo de subjetividad. No gusta.
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