CADA UNO SU RAZÓN

Leo estupefacta: La irritación de garganta, con una voz más áspera y profunda, pero sin dolor, aparece como síntoma temprano de la variante ómicron. Por lo visto esta es una primera alarma antes de caer enfermo. Yo creo que ya nos estamos volviendo completamente majaretas. No me extraña que en los hospitales hagan más falta camas en Psiquiatría que en cualquier otra planta de sea cual sea la patología; porque si es digno de noticia y consecuente publicación que le pique a usted la garganta, o se le agrave la voz, como síntomas alerta de estar contagiado, es que hemos perdido el norte.

No me extraña que estén los centros de salud llenos. No me extraña que los médicos no den abasto. Que las colas en las proximidades de farmacias y centros sanitarios sean más largas que las del hambre. No me extraña que las aceras se hayan llenado de pacientes ciudadanos enmascarados, ubicados entre sí a una distancia de seguridad impecable, pacientes por la paciencia, que no están enfermos, sino absolutamente sanos. Les pasa que les pica la garganta, o se les ha agravado la voz. Quizá ayer se bebieron el Guadiana, el agua de los floreros o se fumaron las tabas. Puede ser. A lo mejor solo le pica la garganta. Quizá un chaval, en edad de merecer, ha tornado su voz de niño a hombre. Han pasado los pitos y ahora puede presumir de un grave tono de barítono, como el de su padre. Hará las maravillas de las noches de verano con su guitarra y su tono. Conquistará corazones románticos con su “Chica de Ipanema”, de fácil y engatusante melodía. A lo mejor no está contagiado. Esta peste que recorre Europa, que aísla a los enfermos y a los mayores, que prohíbe el contacto físico. No sé yo cómo vamos a reparar esto. Nueva palabra para indicar la enfermedad cóctel entre gripe y covid. Pero vamos a ver, vamos a parar un momento y reflexionar. Hay que dejarse de tonterías. 

Esto no puede ser. Alguien tiene que poner algo de juicio y raciocinio en este asunto porque en caso contrario realmente vamos a tener un problema muy serio. Estamos perdiendo la perspectiva, debemos ser capaces de discriminar lo que es importante de lo que no es importante. Ni el buenismo ni la tontería.

Me quedo con Nacho y Antonio, 

¿Cuál fue su reacción cuando esa mirada encontró, y le hipnotizó, congelando su expresión?

Ella es como un imán, que le quita todo el metal, tal es su ambición, que él no da un paso atrás.

Él es la ingenuidad, ella el saber estar, él sueña con hallar la interacción genial, poderla repeler a distancia un poco prudencial.

Tal vez sea mejor no entenderse entre los dos para conservar cada uno su razón. 

Se encuentran al azar, hiperrealismo sensual e imaginación y se enfrentan sin hablar. Difícil elección, o filosofía o amor o lo funcional o a la escuela emocional.

Le gustaría hablar de algo que no es real, antes que escuchar lo que conoce ya.